SOCIEDAD › IMPUTARON A GUSTAVO CORDERA POR “APOLOGIA DEL DELITO E INCITACION A LA VIOLENCIA”

La declaración suma denuncias

La Justicia federal imputó al músico por sus polémicos dichos pronunciados en una escuela de periodismo. El fiscal pidió al juez que requiera el video de la charla y que alumnos y docentes sean citados a declarar como testigos.

El fiscal federal Ramiro González imputó al músico Gustavo Cordera, ex líder de Bersuit Vergarabat, por supuesta “apología del delito e incitación a la violencia” por sus dichos, durante una charla con alumnos de periodismo, en la escuela TEA Arte. “Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas y sienten culpa por no poder tener sexo libremente” y “es una aberración de la ley que si una pendeja de 16 años con la concha caliente quiere coger con vos, vos no te la puedas coger” fueron algunas de las frases que el músico dijo durante la charla, que forman parte de la causa a cargo del juez Rodolfo Canicoba Corral.

En el dictamen, el fiscal González se pronunció en favor de abrir la investigación por “apología del delito e incitación a la violencia” en base a las denuncias presentadas el martes, de manera conjunta, por el Consejo Nacional de las Mujeres (CNM) y el Instituto Nacional contra la Discriminación, Xenofobia y el Racismo (INADI). Entre otras medidas, el fiscal pidió al juez que requiera el video de la charla y que se cite a declarar como testigos a algunos de los alumnos de la escuela de periodismo que estuvieron presentes en el encuentro, así como también pidió el sumario administrativo abierto en el Inadi a raíz de lo ocurrido. Esta causa se suma a las que ya estaban radicadas: una, en la Unidad Fiscal para la Investigación de Delitos contra la Integridad Sexual de Niñas y Niños (Ufisex); la otra, en el Juzgado de Instrucción Nacional N° 19, presentada por el abogado Vadim Mischanchuk, de la Asociación de Médicos Municipales.

Esta semana, Cordera publicó en su perfil de Facebook una carta en la que reconoció que cometió “errores” con sus declaraciones pero, a la vez, se definió como “un artista que no pudo mirar dónde estaba”. “Traicioné a mi persona que repudia toda clase de violación y ofendí al universo de la mujer, que es lo que menos hubiera querido hacer”, escribió el músico. “Y aunque siempre tomé mis errores como una luminosa comunicación con Dios, esta vez transgredí un límite por lo cual estoy profundamente arrepentido” porque habló “en tiempos donde hay tanta sensibilidad con el tema violación”. Cordera se describió como “un artista que no pudo mirar dónde estaba, este delicado tema merecía ser tratado en un ámbito académico y lo hice en un ejercicio con estudiantes de periodismo de espectáculos”. Por eso, anunció en esa carta publicada en la red social, va a “detener la marcha y tomar distancia por un largo tiempo”.

Inicialmente, el músico había asegurado que lo dicho ante los alumnos de periodismo había tenía por marco un ejercicio de “psicodrama”, porque las docentes le habían dado “la consigna” de “provocar reacciones y disensos”. Sin embargo, luego aseguró: “me siento un pelotudo y me mandé una cagada”. A la vez, acusaba al alumno que difundió sus palabras: “este pibe violó, un poco, lo que íbamos a hacer entre todos ahí”.

Las declaraciones del músico fueron realizadas el lunes de la semana pasada, durante una charla con alumnos de periodismo de la escuela TEA Arte y donde se realizan simulacros de conferencias de prensa, con celebridades. Cuando una alumna preguntó por las denuncias de abusos sexuales en el mundo del rock, Cordera dijo: “es una aberración de la ley que si una pendeja de 16 años con la concha caliente quiere coger con vos, vos no te las puedas coger”, para agregar que un adulto no es responsable de una relación con una menor de 13 años. Luego, continuó: “Si yo tengo algo bueno para darte puedo desvirgarte como nadie en el mundo’ avalándose en que para (él) el sexo no es basura”. En otro momento de la charla agregó: “hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas y sienten culpa por no poder tener sexo libremente”.

Tras la difusión del episodio, el músico comenzó a cosechar repudios (como los de la Legislatura porteña, la Defensoría General de la Nación) y denuncias, al tiempo que se fueron cancelando los recitales que tenía programados.

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Cordera publicó una carta en la que se disculpó por ser “un artista que no pudo mirar dónde estaba”.
Imagen: Pablo PIovano
 
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