Tres niñas sufrieron descomposturas y desmayos tras ser víctimas de agresiones por parte de otros chicos que cursan un año más adelantado que ellas. Los hechos ocurrieron en un colegio de las ciudad de Tartagal, en el norte salteño. Según la denuncia que una madre hizo en medios de comunicación, a las nenas les pusieron bolsas de plástico en sus cabezas, provocándoles asfixia. 

Las agresiones acontecieron la tarde del lunes 22 de abril, cuando se desarrollaban actividades en el marco de los 33 años del Colegio secundario Jesús Reyes, de Tartagal, cabecera del departamento San Martín.

“Yo me enteré por los medios”, dijo a Salta/12 Milton Wayar, supervisor del Nivel Secundario en la zona norte de la provincia. Añadió que ayer tenía que analizar los descargos que rubricaron los directivos, profesores y preceptores que se encontraban en ese turno.

“Ya instruí que se trabaje con el programa Escuelas que Sienten y Aprenden, el equipo del POE (Programa de Orientación Escolar), y los chicos involucrados”, afirmó el funcionario.

Sostuvo que mientras tanto también se derivará el caso para su tratamiento al único Gabinete Psicopedagógico que funciona para toda la jurisdicción de Tartagal, una de las urbanizaciones más grandes de la provincia después de la ciudad de Salta. 

Denuncia de una madre

La madre de una de las alumnas que se descompusieron contó en declaraciones al canal de televisión VideoTar que su hija fue prácticamente obligada a participar de un “juego” denominado “Túnel del Terror”. 

Los dichos coinciden con la descripción de la directiva de la institución, quien en el mismo canal, sostuvo que padres y madres habían ayudado al estudiantado a ornamentar un espacio del colegio con, entre otras cosas, bolsas que simulaban ser telarañas.

La madre contó que una vez adentro del aula que hacía de "Túnel", a su hija le pusieron una bolsa en la cabeza además de sacarle las zapatillas, y fue tal la situación que soportó que luego vomitó. La mujer agregó que mientras esto acontecía en el aula, otros estudiantes estaban afuera vigilando “que nadie ingrese”.

La madre dijo que se enteró porque un poco después de las 15.30 de ese día le pidieron que acercara un par de zapatillas a su hija. Y al llegar se dio con la nena descompuesta, que le contó lo que había pasado. 

Aunque no se brindó mayor información oficial sobre el hecho, se supo que la Policía tuvo que intervenir, y también hubo que pedir ambulancias ante la descompostura de niños.

Trascendió que el "juego del Túnel del Terror" es un "bautismo" que deben atravesar los niños y niñas recién ingresantes al colegio. 

La directora del establecimiento dijo en declaraciones públicas que involucrar en los festejos de la institución al alumnado es una práctica que busca el compromiso de quienes asisten a estudiar. Añadió que hay distintas tareas institucionales que tienen por objetivo que el estudiantado reflexione sobre el manejo emocional y la empatía, por lo cual les sorprendieron aún más estos eventos.

En cuanto a la cantidad de personal, reconoció que en la preceptoría cuenta con dos personas por turno, cuando deberían ser cuatro.