“Nos joden la provincia y la Nación, esa es la verdad”, enfatiza Pablo Javkin en defensa de Rosario, la ciudad donde es intendente desde hace casi cuatro años y que ahora espera ganar la interna de las PASO de Unidos por Santa Fe para lanzarse a la reelección. "Muchos te dicen no se ve un plan, es al revés, acá había pocos hechos. Hoy hay que hacer, después la gente tiene el derecho de juzgar", dijo en una entrevista a Rosario/12.

-Es momento de hacer un balance de tus casi cuatro años de gobierno.

-Son dos etapas. Una etapa fue la pandemia, una experiencia hiper traumática que deja muchas secuelas que todavía estamos transitando, de golpe tuvimos que aprender a hacer algo que nadie sabía hacer, la ciudad entera se organizó bien. No te puedo decir que fue satisfactorio porque una pandemia nunca lo es y además se pierden muchas vidas, pero la ciudad funcionó bien, se logró un equilibrio entre la actividad económica y la cuestión sanitaria con una sociedad tan agrietada donde se abría y se cerraba todo. Fue un año también de mucho laburo con el Concejo de ordenanzas muy estructurales de la ciudad que empiezan a ver sus frutos ahora: los cambios del Código de Convivencia, la ordenanza nueva del suelo industrial, cuestiones que tiene que ver con el aporte al proceso de digitalización de trámites. Muchas cuestiones en las que nos pudimos poner de acuerdo, no solo en cómo enfrentar la pandemia sino también en cómo crear algunas transformaciones que la ciudad necesita.

-Perotti en tiempos de pandemia fue un aliado importante, incluso en algún momento se llegó a especular políticamente que podría haber una alianza en el futuro pero ahora tienen una relación con ciertas asperezas con un tema clave que es la seguridad.

-Yo tuve una muy buena relación con el gobernador, incluso muchos años antes de la pandemia donde teníamos un contacto casi diario para encontrar herramientas comunes para enfrentar algo que desconocíamos, pero a mí no me cambió el vínculo. Por lo pronto tengo muy claro que la ciudad necesita de la provincia de Santa Fe y del gobierno nacional respuestas que hoy la ciudad no tiene, que exceden la coyuntura con el gobernador, son estructurales… la policía se organiza con más eficacia en Santa Fe o en el departamento Garay que en Rosario, tenemos un problema de financiamiento de obras que perjudica a la ciudad, estamos fuera del Régimen de Obras Menores y fuera de la actualización del Fondo del Conurbano… nos joden, esa es la verdad, en provincia y en nación. Yo lo único que hago es ser específico, es mi rol defender la ciudad y si no se entiende no es un problema que tenga que ver con una cuestión emocional o circunstancial, no puede ser que una ciudad que tiene la situación de Rosario a la que a muchos les encanta comentar no reciba las cuestiones básicas que tiene que recibir. Mirá las causas judiciales de estos días que tienen que ver con lo que fueron las intimidaciones de escuelas, balaceras de instituciones, la amenaza a la familia Messi, el homicidio de Jimmy Altamirano. ¿De dónde salió todo? De dos penales federales. Tanto el gobierno de Santa Fe como la nación acá tienen un programa de trabajo. Hace un tiempo me decían que no le decía nada al gobernador… Yo siempre digo lo mismo: ¡Déjense de joder con el tema de inseguridad en Rosario! porque es abordable… Y basta del análisis teórico, en qué ideología política entra que una persona pueda libremente asesinar desde una cárcel. Eso sucede acá y matan un pibe que es músico para mandar un mensaje entre dos bandas, siempre estamos hablando de personas que están cumpliendo condena en cárceles. El 90% de los hechos de homicidio sucede ahí. Este país no tiene inteligencia criminal, no tenemos ninguna de las herramientas básicas de un Estado, yo puedo discutir sobre el poder de la pena, lo que no se puede discutir es que la seguridad no sea un problema del rol del Estado, que la presencia del Estado no sea clave a la hora de cuidarle la vida a los vecinos.

-La policía es un problema.

-La policía es un doble problema, es un problema en la carencia de los recursos que la ciudad necesita y es un problema en el sector de la policía que está ligado al delito que también aparece en todas las causas.

-Pandemia y seguridad están asociados a tu gestión. ¿Cómo te parás frente a ello con vistas a tu eventual reelección como intendente?

-No importa cómo me jugó a mí, importa lo que está pasando en la ciudad, están pasando un montón de cosas que hace mucho tiempo no sucedían. Por lo pronto esta ciudad tiene un problema estructural de 10 años para atrás que es “comerse” el costo de la deuda que necesitabas invertir en el recurso de capital. Para hacerlo más claro: pagar deuda de intereses más que el arreglo de las calles... y lo resolvimos. Es un principio fundamental porque cuando vos mirás los problemas estructurales que tiene Rosario hoy al vecino que vive en barrio Las Delicias hace 37 años que la ciudad le debe su obra de eliminación de zanja, al vecino de Empalme Graneros después de la inundación le prometieron el pavimento definitivo... cuando vos decís “vamos a invertir” en algunas cuestiones urbanas que hacen a la seguridad y tenés que urbanizar barrios además del financiamiento externo que vos consigas -puedo pedir financiamiento nacional pero no te lo pagan de entrada-, tenés que adelantar mil palos, si vos no tenés para adelantarlo la obra no se hace. ¿Por qué estamos terminando villa Banana ahora,  Ludueña, bulevar Segui? Porque yo adelanté fondos. Cuando vos ves el programa de obras públicas hacía muchísimo tiempo que no se hacía un centro de salud desde cero, hicimos nueve centros Cuidar en la ciudad, el viejo Crecer de Binner, chicos de 0 a 3 años en un jardín de infantes, hay mucho análisis abstracto, poco conocimiento de recorrer la ciudad. Pasó lo mismo con las plazas, con la iluminación, "se derrumba el centro de la ciudad" decían las notas periodísticas, hoy debemos tener el mejor momento del centro de la ciudad en tres décadas. 

Pasaron dos años de esa catástrofe, la evaluación la hará la gente, lo que te digo es que Rosario tenía taras insoportables, teníamos mil hectáreas destinadas a baldíos, la pasamos a suelo industrial, hoy tenemos 85 establecimientos industriales, eso va a implicar empleo industrial, que recupera la idea de una Rosario de industrias, tuvimos 60 años de pleno empleo y nos fuimos con el menemismo a 28 % de desempleo y los hijos y nietos de ese 28 por ciento de desempleados son los que están siendo víctima de la economía narco o involucrados en ese circuito. Para revertir eso hay que rearmar el circuito industrial de la ciudad para que los hijos de esos pibes tengan la oportunidad de tener un laburo o con la tecnoteca en la economía del conocimiento que la vamos a inaugurar en diciembre o con el desarrollo de la biotecnología a partir del acuerdo del puerto de la innovación y la incubadora con la universidad. Lo que pasa que acá muchos te dicen no se ve un plan, es al revés acá había "demasiados" y pocos hechos. Hoy hay que hacer, después la gente tiene el derecho de juzgar.

-¿Pero no arrancaste tarde?

-¡No arranqué tarde! Arranqué apenas ordené las cuentas y la pandemia terminó. Yo les pregunto a los que dicen lo que vos me preguntás. ¿Están haciendo obras públicas la provincia o la Nación? Están paradas las obras públicas. A mí me retan y me gritan por qué hago tanto ahora que se complica el tránsito y yo las hago porque si no me agarra la inflación y me come el 10% por mes de la obra.  Arranqué como podía arrancar. Nosotros teníamos en 2019, 16.5 de pesos de deuda sobre 100. Hoy tengo 2.8… ¿Sabés cuánto invertía la ciudad en bienes de capital en ese momento? Dos. ¿Sabés cuánto invierte ahora? El 13.

-Pero estos datos no los brindaste en su momento.

-Lo dije en mi primer discurso de la sesión de apertura del Concejo. Fue un 6 de marzo y el 12 empezó la pandemia y nadie va a hablar de lo que yo dije el 6. Yo expuse claramente cuál era la situación y además no es un problema con Mónica (Fein), ella también heredó un problema estructural de la ciudad por algo que no era necesariamente malo: la provincia imponía un ritmo de obra y vos tenías que completarla, a veces terminarla era más caro que hacerla. Sí, era muy bueno que la provincia lo haga pero a la ciudad la estresó económicamente. No es una imputación política sino una realidad objetiva y lo revertimos con dos cosas que en la ciudad no se hacían desde hace 50 años: emitimos letra del Tesoro en pesos y resolví un problemón porque teníamos deudas con proveedores desde hacía dos años y ahora aprobamos un bono de pavimento definitivo que nos fue bárbaro y nos acompañó todo el Concejo.

-El punto débil ha sido el transporte urbano.

-Sí, nos fuimos a la D con la pandemia. Cómo funciona un sistema de transporte. Vos tenés que vender boletos como ingreso económico, en Argentina no, en Argentina tenés que conseguir subsidios. Acá hay dos países. Es 50 a 1 lo que recibe un colectivo y mejoró un poco porque era peor. La ciudad tenía 600.000 pasajeros en los años 80. Yo bajé en un día de 450.000 a 50.000 en un día y por meses. En el medio hubo que absorber a El Cacique.Tuvimos que hacer una ordenanza de emergencia, tuvimos que armar el equipo para pasar de la D a la C, el de la C a la B para llegar de la B Nacional, donde estamos ahora. Nos faltan mínimo unos 40 coches nuevos. ¡Andá a comprar un colectivo en la Argentina, que la aduana te lo deje entrar! Si la cosa se acomoda en la Argentina y sobre todo si se abre la discusión más seria sobre el tema de subsidio, yo puedo llegar a los 740-750 coches. Hoy estamos con más pasajeros que antes de la pandemia, estamos llegando a los 480.000. ¿Dónde anda mejor el transporte? Donde es provincial aunque algo contribuye acá, o donde pone la nación en AMBA y el resto estamos peleando. Yo quiero llegar a la A pero vengo de la D.

-Explicame tu foto de campaña con Carolina Losada y Patricia Bullrich.

-Son dos cosas diferentes. Por un lado acompaño a Carolina Losada dentro de un espacio en esta interna de Unidos por Santa Fe y por el otro estoy convencido de que tenemos que exigirle a todos los candidatos a Presidente -a Bullrich, a Larreta, a Massa-, un compromiso efectivo con Rosario. La Argentina debe resolver cuatro cosas básicas no solo para Rosario: la inteligencia criminal penitenciaria; el control de las rutas por las cuales se mueven las armas y las drogas: la creación de una agencia federal que combata los Delitos Complejos federales como en cualquier país del mundo; y los apoyos a tareas de urbanización y modificación del entorno del hábitat que requieren mejorarle la vida a la gente y por supuesto quitarle violencia a sus propios barrios. Se lo voy a pedir a los tres cuando vengan a Rosario. Yo soy el intendente, tenemos que salir de la idea de que la institucionalidad tiene valor cero. Y si puedo firmar un compromiso por escrito mucho mejor, nosotros lo que hace mucho tiempo dejamos de hacer es  lobby por la ciudad. Hay que hacer fuerte lobby rosarino con todo aquel que tiene una posibilidad de ayudarte.

-Pero vuelvo a la foto, es una señal hacia un proyecto nacional de derecha.

-Cómo justificás ese análisis con los candidatos en pugna. La elección nacional está marcada por un panorama muy recortado, no me echen la culpa a mí por eso. Lo que tenemos que hacer nosotros es lograr respuesta a los problemas de la ciudad. Sí está claro que la provincia tiene que tener otro rumbo para Rosario y la Nación también. Lo otro, el panorama nacional, en términos de opciones está todo muy cruzado. Yo la conozco a Bullrich desde hace muchos años desde la militancia política, y veo posicionamientos políticos en otro lado de gente que estuvo en otro posicionamiento. Es un quilombo nacional. Pero vayamos a los temas, no es que uno sea pragmático pero hay mucho verso. ¿Sabés por qué no hay consenso posible? Porque acá ganás diferenciándote. Claro que hay posicionamiento ideológico pero vamos a resolver los temas. Lo demás es verso, ver quién corre a quien, estoy harto de  que intenta correrme por izquierda, alguien que no tiene idea de que hay una familia humilde del oeste que cruza Villa Banana pavimentada, pasa por una de las plazas más lindas de la ciudad y su hijo estudia robótica en el distrito.

-Hay un eslogan que lanzaste en su momento: “recuperar la calle para la buena gente”.

-Me dijeron barbaridades… “las calles para los buenos”.... "suena a maniqueo" decían. No es verdad. Hoy el debate internacional pasa por la expansión del crimen internacional vinculado al capital financiero y su falta de controles; la inteligencia artificial con los dilemas éticos que plantea; la vuelta de los conflictos armados convencionales; y la crisis de la democracia en el mundo. Decime de acuerdo al posicionamiento político ideológico de Argentina si es parte de la agenda o estamos discutiendo la agenda de hace 80 años. Hay que posicionarse frente a los fenómenos de hoy y resolverlos, esto es lo que permite la cercanía, lo otro es pose. Yo no estoy para hacer una pose.

-La otra frase que a mí me gusta es “por una ciudad sin miedo”.

-Me gusta, la está usando otra fuerza (Ciudad Futura-Movimiento Evita) y está bien. El miedo no se resuelve con grietas.  El miedo no se resuelve con posicionamiento ideológico, el miedo se resuelve con hechos. ¿Vos cuándo vas a dejar de sentir miedo? Cuando vas 10 veces a un mismo lugar y no te pasa nada. ¿Y eso qué requiere? Luces azules, presencia policial, gestión de la seguridad de quienes la tienen, o que nos la deleguen, y también atracción en el espacio público. Cuando hicimos la primera noche de peatonales nadie pisaba el centro de noche, la inseguridad es hija de la desolación, los entornos seguros no son los más custodiados, son lo más habitados. La idea es que si la gente laburante, buena, está en las calles es más difícil que padezca las cosas que no tienen que pasar. Pusimos Led donde no había luz. Me importa nada la calificación ideológica. ¿Sale la gente de noche en plazas Las heras, López, Buratovich, sí o no? Generamos escenarios culturales, el anfi explotó como nunca, agregamos la rural, el autódromo, el hipódromo, tenemos un festival de folklore… si vos en los 52 fines de semana del año tenés una oferta pública, de calidad y diversa, generada por interacción pública y privada (lo dije en la revista Barullo), eso es una ciudad más vivible.

-¿Qué le decís al rosarino para que te vuelva a votar?

 

-Que me deje hacer, que me tenga confianza. A esta ciudad hay que rearmarle el tejido social y el tejido vincular como ciudad. ¿Qué necesitás para eso? Muchas obras, vida en las calles. Yo no te puedo pronosticar el resultado. Tengo para mí que va a ser muy diferente al que todos se imaginan en general, sé que hay mucha gente enojada conmigo pero esta es una ciudad maravillosa, dejémonos de joder con aceptar que nos jodan, dejémonos de aceptar que nos den 50 veces menos de subsidio, 25 veces menos de obra, 10 veces menos de patrullero. Eso no se lo voy a aceptar a nadie. A mí me parece bárbaro que haya gente que opine mal de la gestión porque hay un montón de cosas que evidentemente no están bien, lo que digo es pongamos proyectos concretos, basta de poses.