espectaculos

Domingo, 16 de octubre de 2016

TELEVISION › NICK ANTOSCA, CREADOR DE LA MINISERIE CHANNEL ZERO

Todo mito urbano es de terror

Los seis episodios del envío que puede verse por SyFy son autónomos, a la manera de American Horror Story, y están basados en un relato de horror concebido originalmente online por el dibujante y guionista californiano Kris Straub.

 Por Javier Aguirre

El mito urbano de terror es aquel que, justo después del escalofriante remate, genera un silencio: uno de esos silencios que se sienten en el espinazo. Ese histeriqueo perverso con el verosímil, esa doble gambeta de una presunta historia real que todo el mundo sabe que es ficticia pero que igual deja alguna duda, es la mejor promesa que envuelve a Channel Zero, la miniserie de terror que emite la señal SyFy. Se trata de una producción de seis episodios, con un eje temático diferente para cada temporada (a la manera de la exitosa aunque declinante American Horror Story), con una segunda parte ya anunciada para 2017, y un componente de nostalgia y un elenco con púberes retro que invitan a asociarla con Stephen King o el hit de Netflix, Stranger Things. La temporada debut de Channel Zero se basa en Candle Cove, un relato de horror concebido originalmente online –y con espíritu de mito urbano– por el dibujante y guionista californiano Kris Straub. La preexistencia de Candle Cove (el relato) en Internet ayuda bien al estreno de Channel Zero en términos de marketing y embarra deliciosamente la cancha del googleo. Uno se enfrenta a un mito urbano que parece construido como un mecanismo de relojería de la era online, con videos caseros que cronológicamente son muy anteriores a Channel Zero, con GIF en los que algo imperceptible casi alcanza a percibirse, con viñetas que confunden más de lo que ilustran, y con foros y blogs apócrifos de internautas que discuten (¡hasta en español!) sobre el origen del relato: un presunto programa infantil de TV de los años 70 en los que unas marionetas espeluznantes asustaban a los niños mucho más de lo que los divertían. Todas esas piezas de marketing no oficial (¿o serán en sí parte de la obra?) conformaron una rica previa online para el estreno de Channel Zero, con un universo de niños de los 70 que hoy recuerdan a villanos robapieles, bigotes sin cara, calaveras, piratas y entidades maléficas escondidas en la “lluvia” o estática de la televisión.

La otra tecla que Channel Zero parece dispuesta a toquetear es la de un subgénero incipiente, en términos universales: el de la borrosa memoria pre digital, donde todo aquello que sea previo al mundo informático y que nadie haya digitalizado estará listo para convertirse en tiniebla, susurro, duda y oscurantismo… o bien estará listo para no existir. Página/12 entrevistó al autor de la serie, el estadounidense Nick Antosca, guionista con experiencia en las series Hannibal y Teen Wolf, y responsable de la versión 2017 del clásico Friday the 13th.

–¿Channel Zero es una serie sobre mitos urbanos?

–Sí, sobre mitos urbanos, pero en especial, es una serie sobre pesadillas. Cada temporada se basa en una historia corta con un concepto ingenioso e inquietante. Las historias son muy breves y las temporadas son como la pesadilla que uno tiene la noche posterior a haber visto o haber leído una historia de miedo. Es, definitivamente, una serie de horror por la escalada de espantos, recuerdos y temores comunes que tiene. Las historias que circulan en la Internet, las llamadas “creepypasta”, son las nuevas leyendas urbanas. No es algo nuevo, sólo que ahora los relatos aparecen en una nueva forma. La gente cuenta historias de terror desde siempre.

–¿Qué series de TV tuvo como referencia a la hora de escribir Channel Zero?

–¡Twin Peaks y Los Expedientes X! Y en cuanto a los programas infantiles, siempre me aterró un episodio del dibujo animado de TV de Los Cazafantasmas, en el que las ventanas de una casa se abrían como ojos para observar a los protagonistas.

–Los avances de Channel Zero muestran un humanoide construido íntegramente con dientes… ¿A quién se le ocurrió eso?

–Es el Tooth Child, el Niño Diente. Lo vi… lo vi en una pesadilla que tuve, precisamente, mientras trabajaba en la adaptación de Candle Cove. Creo que se relaciona con recuerdos y temores de la infancia, como la pérdida de los dientes (un sueño pesadillesco que es común entre los adultos también, con implicaciones específicas). También con el crecimiento y con el Ratón Pérez.

–¿Qué necesita una historia de terror para ser una buena historia de terror?

–Tiene que contar con personajes humanos bien reales. Tiene que mostrarte cosas que no hayas visto antes. Y tiene que permanecer con vos después de haberla visto.

Compartir: 

Twitter

Tooth Child, el Niño Diente, se le apareció al creador de Channel Zero en una pesadilla.
 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.